
Víctor Martín explica que el baloncesto le ha enseñado que no existen limitaciones. A él no le hace falta caminar y medir dos metros para encestar. Su entrenador, Roberto Cano, explica que es un proyecto maravilloso, pero que la oferta deportiva para discapacitados es muy escasa y los recursos son mínimos. Para él cada entrenamiento es una muestra de la lucha y la grandeza de la condición humana.
¡¡¡VIVA EL EQUIPO DE BALONCESTO EN SILLA DE RUEDAS!!!! Sois los mejores.
ResponderEliminarvisca barça
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